Un club que se la jugó…y ganó

Ayer fue uno de esos días en los que vivimos entre la tensión de un partido vibrante y la emoción de un ascenso que llegó en la primera de las oportunidades, tras unos minutos finales de infarto en las dos pistas donde se jugaba la primera de nuestras opciones de ser una ciudad ASOBAL.

Y con el meritorio esfuerzo de los nuestros, llegó el primero de los triunfos, el que corría de nuestra parte. Lo que paso en el otro campo fue un regalo anecdótico que no hizo otra cosa que certificar cuanto antes lo que estaba por certificar; que tenemos un equipo muy grande, con un club muy grande y en una ciudad muy grande.

Podría parecer ésto el inicio de una crónica deportiva, pero nada más lejos de nuestra intención. Lo que queremos y debemos resaltar en estas líneas es el merecimiento de un club que ha “apostado” por el deporte y sus valores. Que con trabajo y sin renunciar a sus principios ha sacado adelante un equipo digno de elogio y admirado por una afición volcada con sus jugadores. 

Detrás de todo ello hay un esfuerzo gigante en la búsqueda de opciones para financiar los innegables gastos que un equipo de nivel necesita para una competitividad extrema en el camino del ascenso. Sin embargo, siempre tuvieron claro que no iban a promocionar entre sus bases, aficionados o vecinos la distorsión actual entre juego deportivo y juego “apostado”. Incluso renunciando a cantidades importantes ofrecidas por aquellos que ven las apuestas una fórmula estupenda de hacer negocio. 

El balonmano de Torrelavega dijo, ¡no, gracias!. Y no solo eso, se implicó con nuestra entidad para que sus bases tuvieran prevención en la conductas adictivas al juego, lució con orgullo a nuestra entidad por todas aquellas ciudades que vieron como un equipo de Torrelavega reclamaba un deporte sano desde el esfuerzo y la constancia, y pedía que los chicos y chicas sólo se la jugaran en la pista, no así en la vida. 

Por eso, este club se la jugó claramente. Y por eso este club merece sin duda los dos mayores logros que se pueden tener: el ascenso a la máxima competición nacional, y el cariño, respeto y admiración de una ciudad que tan volcada está en la defensa de los problemas sociales y sanitarios. 

Desde nuestra parte, con el orgullo de haber estado cerca de vosotros, todo nuestro afecto, agradecimiento y admiración por un trabajo muy bien hecho.

¡Enhorabuena Campeones!

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